Introducción
La maternidad subrogada
retribuida está autorizada en pocos lugares del mundo, entre ellos la India. Este país se ha convertido en el principal proveedor de madres de alquiler, por su precios bajos, su escasa regulación y sus buenos estándares de calidad en clínicas privadas.
Ahí, un
embarazo cuesta unos 25.000 euros, un precio muy bajo en comparación con otros
países como Estados Unidos, donde el precio llega a unos 80.000 euros.
El fenómeno ha
derivado en una fuente de ingresos muy interesante para la India (se habla de
unos 300 millones de euros anuales), donde proliferan unas 3.000 clínicas
especializadas en madres de alquiler.
Madres de alquiler en una famosa clínica de vientres
de alquiler en India, a la que peregrinan cientos de parejas con problemas de
fertilidad de Europa, Australia y Japón.
Problemas para la madre de alquiler
Para empezar,
las mujeres contratadas en las clínicas de vientres de alquiler deben residir
junto a otras madres de alquiler en unos pabellones desde que se confirma el
embarazo. No pueden salir para evitar que tengan relaciones sexuales durante el
embarazo.
La típica madre de alquiler india es una mujer del campo, pobre, que recurre a esta práctica como último recurso para obtener dinero para criar a sus propios hijos. No pocas veces se trata de mujeres analfabetas, que ignoran lo que supone el procedimiento. Este perfil evoca inmediatamente la idea de explotación, de una mujer utilizada como útero de alquiler.
La típica madre de alquiler india es una mujer del campo, pobre, que recurre a esta práctica como último recurso para obtener dinero para criar a sus propios hijos. No pocas veces se trata de mujeres analfabetas, que ignoran lo que supone el procedimiento. Este perfil evoca inmediatamente la idea de explotación, de una mujer utilizada como útero de alquiler.
También existe
una gran diferencia entre lo que paga el cliente y lo que cobra la mujer.
Siempre hay un tercero, las clínicas, que se lleva la mayor parte. Las madres
de alquiler solo perciben unos 5.000 euros por los nueve meses de embarazo.
Problemas debido al vacío jurídico
El negocio de las madres de alquiler funciona sin regulación legal, y es un sector donde se hacen pocas preguntas.
Cualquiera que pague puede encargar el bebé, ya sean parejas heterosexuales o del mismo sexo, hombres o mujeres solas.
También es posible que la madre de alquiler no sepa para quién será el niño.
Y no pocas veces el recurso a las mujeres indias es un modo de saltarse las prohibiciones del país de origen, como ocurre en el caso de hombres homosexuales que no quieren privarse de un hijo.
El negocio de las madres de alquiler funciona sin regulación legal, y es un sector donde se hacen pocas preguntas.
Cualquiera que pague puede encargar el bebé, ya sean parejas heterosexuales o del mismo sexo, hombres o mujeres solas.
También es posible que la madre de alquiler no sepa para quién será el niño.
Y no pocas veces el recurso a las mujeres indias es un modo de saltarse las prohibiciones del país de origen, como ocurre en el caso de hombres homosexuales que no quieren privarse de un hijo.
Problemas para el bebé
Fuera de esto, llama la atención lo poco que se tiene en cuenta al niño. Por ejemplo, nada se dice de la edad de la mujer que lo encarga, con lo que puede encontrarse con una madre que podría ser su abuela. Como lo que importa son los deseos del cliente, el hijo así nacido puede criarse en una familia monoparental, o en una pareja del mismo sexo, o no saber nunca de sus orígenes genéticos, sin que se haya tenido en cuenta cuál sería la situación favorable para su desarrollo.
Fuera de esto, llama la atención lo poco que se tiene en cuenta al niño. Por ejemplo, nada se dice de la edad de la mujer que lo encarga, con lo que puede encontrarse con una madre que podría ser su abuela. Como lo que importa son los deseos del cliente, el hijo así nacido puede criarse en una familia monoparental, o en una pareja del mismo sexo, o no saber nunca de sus orígenes genéticos, sin que se haya tenido en cuenta cuál sería la situación favorable para su desarrollo.
Un ejemplo de caso problemático que ocurió en la India, debido a esta práctica
Caso
de una niña de tres meses nacida de una madre de alquiler india, que ha pasado
los primeros meses de su vida en medio de una batalla legal.
La
niña nació como resultado de la combinación del esperma de un marido japonés y
el óvulo de una donante anónima implantado en el útero de una madre de alquiler
india.
Los
problemas legales surgieron cuando el padre y su esposa que habían pagado por
los servicios de la madre de alquiler, se divorciaron antes del nacimiento del
bebé. El marido quería tener el bebé, pero su ex esposa ya no lo quería.
En este caso, la madre tenía que estar presente para que el bebé obtuviera un pasaporte, pero ni la madre de la que había nacido ni la ex esposa
querían saber nada.
Al
final, el asunto fue resuelto con una sentencia del Tribunal Supremo de la
India que no sólo dio el bebé al padre japonés, sino que también confirmó que
la subrogación era legal.
ENLACES :
Artículo en el que se
habla de una clínica de fertilización in vitro que ofrece vientres de alquiler
de mujeres en situación de pobreza. Opinión de la directora de esta clínica y
de una de sus madres de alquiler.
- - https://www.youtube.com/watch?v=9FW-YWZRw3I
Reportaje de 2012 : Últimamente la India se está convirtiendo en una particular meca para las familias de Occidente que buscan las denominadas "madres de alquiler". La situación podría ser totalmente idílica si no fuera por la extrema probreza que empuja a las mujeres locales a arrendar su vientre para ganarse la vida.
- - https://www.youtube.com/watch?v=9FW-YWZRw3I
Reportaje de 2012 : Últimamente la India se está convirtiendo en una particular meca para las familias de Occidente que buscan las denominadas "madres de alquiler". La situación podría ser totalmente idílica si no fuera por la extrema probreza que empuja a las mujeres locales a arrendar su vientre para ganarse la vida.
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